La contaminación sonora afecta a la sociedad en su conjunto: Se ha demostrado que el ruido genera estrés, ansiedad y taquicardia, nada bueno para una persona que sufre de presión alta, pero en especial para los bebes, niños y personas con TDA, y TEA (Trastorno del espectro autista).
Es necesario destacar que los ruidos producidos por los caños de escape libre o modificado, están prohibidos por el del artículo 77 de la Ley Nacional de Tránsito, el cual dice que “son faltas graves las que afectan por contaminación al medio ambiente”.
En la provincia de Catamarca, algunos municipios prohíben el uso del caño de escape libre o modificado. Algunos ejemplos son: el Municipio de la Ciudad Capital a través de la ordenanza Ordenanza S.G. Nº 917 sobre propagación de ruidos incensarios. También se suma Municipalidad de Belén con la ordenanza 707/16, la cual estipula la sustracción de los caños de escape libre que producen ruido.