El concepto de “nuevas masculinidades” propone replantear la idea de masculinidad y desaprender los roles de género adquiridos durante toda la vida y perpetuados a lo largo de siglos, ofreciendo una alternativa a ese modelo hegemónico que incorpore la perspectiva de género.
La construcción sociocultural de “lo femenino” y “lo masculino” en las distintas sociedades, dicta el deber ser del hombre y de la mujer, de acuerdo con lo que tradicionalmente se entiende como femenino y masculino, reflejándose una estructura jerárquica de dominación que se ha denominado patriarcado, una distribución desigual del poder entre varones y mujeres que, históricamente, ha empoderado lo masculino por sobre lo femenino, siendo ésta la base de las desigualdades que afectan a las mujeres.