El proyecto de ley se trata de visibilizar, concientizar y formar a la ciudadanía para poder contribuir colectivamente a la desnaturalización de las distintas formas de violencia y avanzar hacia una sociedad que los considere efectivamente sujetos de derechos a las niñas, niños y adolescentes y, de esta forma, propender al respeto irrestricto de sus derechos, a garantizarles su ejercicio efectivo y el acceso a la justicia, en los casos en que fueren vulnerados.